Allí donde la madreselva se cuelga de una estrella
y maduran alondras, tus besos en mi piel.
Allí donde el crepúsculo colorea la tarde de arcoíris
y tus labios me miran casi con voyerismo.
Aquí, en este instante en que el amor expira
y se pronuncia 'cielo' - así, como te llamo-
Aquí, tímidamente en este beso de mariposa trasegando mis labios,
casi podría sentir tu vuelo de libélula disfrazada de noche.
Así, entre tus brazos, bebiéndome tu boca como adicta de amor.
Alcoholizada.
Casi pude sentir que también tú me amabas.