Viene en son de paz, bailando su melancolía,
la noche es un velero que lo vuelve hacia el mar de los recuerdos,
lo atormenta el pasado, la tormenta es presente,
y no existe futuro.
El instante en que un hilo de luz hiende su rostro cárdeno
repara en la opacidad de la cara oculta de mi alma,
con sus ojos ausentes.
Vuelve la vista al reloj de las horas perdidas,
una a una las enhebra como cuentas para una gargantilla,
pero ya no me calza, mucho me temo.
Hube de llenarme los bolsillos de esperanza amarilla –de marchita-
madurar el beso de la aurora que apagaba las noches,
darme un golpe de versos,
y no te percataste.
si piensas en volver, no vas a hallarme.
8 Estrellas iluminaron mi claro:
El título es un pleonasmo. Te encanta conjugar los tiempos verbales, y últimamente, más que nunca, en tus versos hay un resabio de melancolía (que en esta ocasión incluso baila). Me gusta la descripción tan lírica que haces en este verso: "El instante en que un hilo de luz hiende su rostro cárdeno".
Un fuerte abrazo, Marisol.
Tuve que volverme a ti, pero tú ya no estabas,
si piensas en volver, no vas a hallarme.
Si vuelve espero de verdad que no te encuentre ... Si te hizo sufrir es mejor que no te encuentre
Bella Mariposa vuela se feliz no pierdas mas horas , un beso
Volviste Marisol, pero "te fuiste" en el poema con la noche atemporal sin puntos cardinales y esperanza amarilla y el campanazo que avisaba pero nadie escuchaba.
Hermoso brote poetico que se hacia extrañar.
Mis abrazos en tu olvido.
Hay carácter en tu poesía, esa melancolía que duele pero a la vez la determinación de decisiones que son irrevocables. Tal vez es el deseo, también irrevocable, de no transarse por menos que la felicidad. Un abrazo Marisol.
Feliz fin de semana ,Mariposa Bella
Las horas que pasan no regresan... el destino se escribe cada hora y lo vivimos cada segundo.... el destino sera lo que tenga que ser...
Marisol querida.... deseo que tengas una excelente semana...
Un beso grande.
JALE
¡Profundo y hermoso!
Gracias por regalarme tus personas que llegan al alma.
Saludos!
"madurar el beso de la aurora que apagaba las noches" qué hermoso te ha quedado este verso. También me gustó el que te destacó Óscar.
Al tiempo perdido es mejor no voltearle a ver. Más bien seguir adelante en busca de una esperanza, pero no amarilla, sino una que esté reverdecida por la vida. Verás que entonces el tiempo te hará falta.
Un gran abrazo, querida Marisol.
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