Ardes, pudor de espuma,
como la exploración del primer rayo de sol
en la explosión de la noche de mi pelo.
Abrazada a tu luz, finjo que duermo
y en el aliento frutal de tu nuca dispuesta,
me desnudo.
Dualidad boca-verso.
El cuerpo de tu voz, invade mis oídos
y arrulla el agua mansa de mi arroyo.
-Es breve la demora de la piel
serpenteando en el caudal del pensamiento-.
Tú, así, siempre, lumínico disfraz de amor enardecido,
envuélveme en la llama de tu ardoroso afán
y enciéndeme a morir lento, muy lento.
4 Estrellas iluminaron mi claro:
Mi querida Marisol: me ha parecido un poema espectacular. Tiene ese sabor de lo que se lee por primera vez, así que es muy valioso. Un abrazo fuerte.
Creo, querida Marisol, que has usado las palabras, exploración y explosión con intención, me refiero a su proximidad, para darle más fuerza al poema. Me han encantado las imágenes, es un poema muy sugerente y sensual, sobre todo, me encantó de manera especial los tres versos del cierre, un beso enorme
Marisol. luego de un largo tiempo estoy de regreso, tus letras como siempre con ese toque profundo entre lieneas... que disfruto...
Excelente post como siempre...
Deseo que tengas un gran fin de semana...
Un abrazo.
JALE
Me ha gustado más ahora el poema que la primera vez que lo leí, y las dos primeras estrofas son las que mejor impresión me han dejado. Ese rayo de sol ha conseguido evocarme el cine de Terrence Malick. Veo también una dualidad agua/fuego.
Un abrazo, Marisol.
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